A lo largo de la vida escuchamos frases como: “no sé lo que quiero”, “nada me llena”, “veremos en el camino que sale”, “no puedo hacerlo porque alguien me robó la idea”, “ellos pueden porque tienen oportunidades o contactos”. Todas estas frases van culpando a personas o situaciones para justificar la falta de sentido en la vida. Sin embargo, estos pensamientos limitantes reflejan a personas viviendo de afuera hacia adentro.
En su mayoría las personas reconocen que mirar de adentro hacia afuera aumentará la confianza para sentirse y verse mejor en todas las áreas de su vida. Aún con este análisis, se puede vivir luchando contra el pasado y con la autoimagen del fracaso.
Esto no significa que la persona no ama su vida o que no sea agradecido con su entorno, pero algo de su esencia se perdió en el proceso de encontrar su identidad. Algunas personas pueden pasar pequeños procesos para encontrarse. Otras viven grandes procesos para reconocer que se perdieron en el camino y con mucho trabajo intentan buscarlo.
El proceso de autodescubrimiento nunca será de la noche a la mañana. La vida continuamente está siendo comparada con el oro. Este metal para ser purificado debe pasar por etapas de preparación y fundición. El oro es fundido a una temperatura alta, hasta que se derrite para ser limpiado. Posteriormente, el metal es golpeado para darle forma y después de cada etapa por la que pasa, sale brillando en su esplendor y es reconocido como el metal más bello, y uno de los que tiene mayor valor.
De la misma manera, cada persona, proceso y autodescubrimiento será diferente al de otro. No obstante, cada etapa empuja al ser humano a un autoconocimiento mayor, a enfrentar diferentes creencias limitantes, a enfrentar miedos e inseguridades traídas con los años y a descubrir el propósito de su vida. Pero hay que tomar en cuenta que no todas las personas en este mundo tomarán como oportunidades de crecimiento las experiencias vividas. Sin embargo, cada quien es responsable de parar, buscar y vivir en su propósito de vida. No obstante, se puede hacer desde el momento que se decida hacer. Siempre que respires, tendrás la oportunidad de buscar el sentido a la vida.
Es importante recordar estas verdades en el proceso de ser speaker woman. No puedes hablar de algo que no te apasiona, de algo que no estás segura para ser y hacer por otros. Pero encontrar lo que te apasiona está ligado a poder auto reconocerse y surge del autoconocimiento. Esto en cuanto a las actitudes y disposición personal, para entender quién eres y quién podrías llegar a ser, si te lo propones y actúas en coherencia con aquello que buscas.
Algunas personas en esta travesía pueden decepcionarse, porque mirar al pasado y soltar, para crecer es doloroso. Nadie quiere recordar y volver a llorar, pero si quieres ser una vertiente de agua se necesita fluir y al fluir se necesita soltar aquello que no deja surgir. Las speaker women tienen historias, marcas profundas, fracasos que aprendieron a verlos como un progreso. De la misma manera, hay consciencia de que ciertas situaciones podrán mejorar de forma personal o de lo que pasa a su alrededor. Pero también existen algunos detalles que no se logra modificar por mucho empeño que se ponga. Asimismo, hay muchas vicisitudes del pasado que ya sanaron y otras siguen en progreso de cicatrización. Pero estas historias, trajeron cambios profundos que no solo nos las impulsaron a levantar la voz, sino que también permiten contribuir en la vida de las que vienen buscando su pasión y propósito de vida.
Hay un verso que dice: “cambia tu manera de pensar, para que cambie tu manera de vivir”. Un cambio profundo empieza en la forma como ves el pasado, el futuro, pero también el presente como la oportunidad, para cambiar tu estilo de vida y la de otras mujeres.