Realmente es todo un reto a sentarme a escribir estas líneas, sobre lo que significa para mí el poder de la palabra femenina, y es que hay tantas cosas que se han dicho, que se han escrito que se han difundo, y aun así sigue siendo difícil poder plasmar en tan poco espacio todo lo que el movimiento femenino ha representado para todas las generaciones, pero sobre todo para mí misma.
Ahora bien, comenzare invitando un poco hacia la reflexión de la forma en como a través del tiempo la mujer ha luchado de manera incesante por visibilizar su poder, posicionando el suntuoso equilibrio de la desigualdad de género como una lucha que le sigue costando lágrimas de sangre, pero de quien hoy se presenta como su trofeo representado en el empoderamiento de una mujer que defiende sus derechos y la ubica como un elemento clave del desarrollo mundial.
En ese punto de mi vida me encuentro, enfocando mi energía hacia la identificación de una líder de cambio, primero que todo humana que ha aprendido a tomar las dificultades como oportunidades de mejora constante, donde he aprendido que es desde el amor la fuente más increíble de generación de ideas para la trasformación, intentando llevar al máximo la calidad de mis acciones , tomando las bondades de la tecnología como una plataforma que trasmite ideas que generan propósito para mí y para quienes me escuchen, para de esta manera ofrecer una visión positiva de un futuro mejor para mujeres y hombres que buscan un mundo utópico donde la verdadera esencia es el liderazgo positivo , entendiendo que todas las herramientas que necesitamos para nuestro proceso evolutivo está dentro de nosotros mismos, porque tenemos todos los recurso para ello y modificando creencias limitantes por medio de elementos de innovación , auténticos y de gran valor , dando palabras de aliento que animen a los demás a actuar por medio del desarrollo de su potencial humano al máximo , tomando como centro de este universo a la mente y su poder , tal como lo expreso uno de los grande pioneros de los libros de autoayuda norteamericano Orison Sweet Marden “ El dinero , la influencia y la posición no son nada comparados con la mente, los principios , la energía y la perseverancia “.
Es por eso que considero el don de la comunicación el comienzo del todo. Si podemos entender e interiorizar la poderosa presuposición de que todo comunica podemos realmente visionar un panorama de transición exitoso donde somos nosotros mismos los únicos responsables de nuestra historia y de la historia de un mundo mejor.
Por lo tanto, debemos entender que es por medio de la palabra y su adecuado uso, un arma infalible para nuestra transformación, porque recordemos que debemos persistir en la consigna de que no existen fallas en la comunicación, sólo retroalimentación continua y constante y que todo esto es parte del entrenamiento para llegar a la cumbre del éxito.
En ese sentido, que mejor tema para compartir con todos aquellos que sientan el despertar hacia una nueva vida el compartir aquellas lecciones que promuevan acciones para lograr nuestros fines y objetivos entrenando y fortaleciendo el líder que tenemos en nuestro interior para vivir una vida con propósito a pesar de los cambios profundos y de la presión constante en un mundo acelerado y que mejor que lo haga una mujer conferencista.